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Crónica
Texto informativo con interpretación

48.000 personas locas por ti, Aitana

La cantante ha iniciado en el Estadi Olímpic de Barcelona su minigira ‘Metamorfosis Season’ en la que repasa los cuatro álbumes de su discografía

La cantante Aitana en concierto en el Estadi Olímpic de Barcelona, inicio de su minigira 'Metamorfosis Season', en la que repasa los cuatro álbumes de su discografía, el 19 de julio de 2025.Foto: Andreu Dalmau (EFE) | Vídeo: EPV
Jordi Amat

Tras cantar Lo malo siete años después, cuando Aitana le agradecía su presencia a Ana Guerra en el escenario de su triunfo total, su compañera no quiso marcharse sin confesar lo que es imposible no pensar si se ha seguido la trayectoria de una joven de un pueblo del área metropolitana que había de ser normal y hoy se ha convertido en estrella de la escena pop de la industria latina del espectáculo: “Mira lo que has conseguido con esfuerzo y trabajo”.

Era la quinta pieza del set y el Estadi Olímpic se vino abajo por segunda vez. La primera había sido con su arranque soñado desde aquel día en Los Angeles cuando grabó la canción de final de amor perfecta para abrir gritando un concierto en un gran estadio. “La veo potencial hit”, dijo en el estudio”, “sí que la veo muy Bernabéu”. Lo es y es una de las canciones del verano: 6 de febrero. En el centro del escenario emerge una plataforma como un trono pop.

Desde el miércoles se escuchaban en el Eixample los ecos de las pruebas de sonido. El jueves a primera hora de la tarde, a 33 grados infernales, estuve paseando alrededor del Estadi mientras la banda ensayaba una versión instrumental del We Will Rock You de Queen. Por una rendija minúscula curioseaba un grupo de chicas de unos 14 años que contaban monedas para comprarse una lata de Coca-Cola. “Yo si fuera Aitana no vendría ahora”, decía una. “Ya ha ensayado bastante”, decía otra. Ayer viernes se cumplieron 8 años del día que aquella chica que acaba de cumplir 18 años se plantó ante el micrófono del casting de Operación Triunfo y pasó la primera fase. De allí a aquí. ¿Cómo lo ha conseguido? La convicción compartida es que una artista que conecta porque logra una genuina conexión sentimental con su público adolescente.

Un momento del concierto de Aitana en el Estado Olímpic de Barcelona el 19 de julio de 2025.

Mi hija, por ejemplo, “No escribas esto, pare”, me dice cuando le pregunto si vale la pena contar en esta crónica que hay muchas chicas como ella calzadas con botazas negras. Sí me autoriza, en cambio, a fijarme en las mariposas que llevan tatuadas unas niñas de su edad a las que fotografía su madre dos minutos antes del arranque puntual. Somos muchas familias, hay muchos grupos de amigas. Cuando ella aparece, las que están dos filas detrás nuestro y llevan bufandas rosas, no pueden contener el llanto. Aitana saluda con un “Bona nit Barcelona” y las cámaras la rodean porque este show ―el primero de gira la Metamorfosis― está concebido para mirar bailes, sus miradas y sus gestos. Top blanco, shorts blancos, botazas blancas. Tienen más presencia el grupo de 30 bailarines, que lo petan en Tu foto del DNI.

La segunda sorpresa es su interpretación de La gent que estimo con Josep Montero, el cantante de Oques Grasses. “La meva cançó preferida del món ara mateix” [“Mi canción favorita del mundo ahora mismo”], confiesa en un escenario inmenso. En ocasiones el público, también el tipo que lleva el cartel “Soy tu fan nº1”, se impone a su voz. En 11 razones la gente se desborda y cuando canta Mon amour el escenario parece una discoteca y todo el mundo salta y baila. “Apunta, pare, que se ha cambiado de vestido”. En el arranque de las coristas previo a Música en el cielo se encienden por primera vez las pulseras: naturalmente color azul. Ya es de noche, la gente se gira y de repente ella aparece sentada en la grada, como una persona más entre el público. Las dos chicas que se sientan detrás de ella, que se saben la letra de memoria, podrían ser ella.

Antes de regresar al escenario, una dj pincha varias canciones de ABBA desde el corazón del escenario con forma de mariposa. “Se ha vuelto a cambiar”, me chiva Maria, y Aitana canta Los Ángeles: “No me importa que dirán, yo quiero otra noche”. Empieza la parte más espídica del show y me parece que soy el único individuo que sigue sentado. El número de baile erótico de Miamor no falla y por unos segundos los padres dejamos de mirar a nuestras hijas, que gritan encantadas. Y ya no paran de bailar porque What is love de Haddaway es la introducción de En el coche, una aceleración que pasa por Gran Vía sin Quevedo y dura hasta que interpreta Cuando hables con él, una balada de desbordamiento confesional que podría ser la banda sonora para recordar con emoción y azúcar el mejor amor, el que se idealiza. “Cuando hables con él, porfa, dile todo lo que estoy sintiendo”. Naturalmente, al ceder la voz al público, ella hace el signo del corazón con las dos manos. Tiene el don de la complicidad.

La cantante Aitana en concierto en el Estadi Olímpic de Barcelona, inicio de su minigira 'Metamorfosis Season', en la que repasa los cuatro álbumes de su discografía, el 19 de julio de 2025.

Mi Maria y yo nos abrazamos cuando el veterano Pep Sala sale al escenario con guitarra acústica para cantar con Aitana Boig per tu, la balada clásica del rock catalán de la década de los 90 y que en su día ya versionó Luz Casal. Este himno del cancionero de mi generación conecta con las suyas. Padres e hijos, felices, cantamos juntos los hits que son Mariposas y Formentera. Aitana, que explica que han llegado tres autobuses con sus familiares, no se transforma.

“A nosotros nos interesa saber que ha aprendido esta niña que ya no es tan niña”, se ha podido leer en las pantallas en el relato que da unidad a la idea de Metamorfosis. Aitana no se transforma sino que evoluciona. Está cantando Las babys, mucha peña sube al escenario y cuando me doy cuenta descubro que mi hija sabe las coreografías que yo traté de bailar en la última boda a la que fui. Aitana ha triunfado en su primera noche en un estadio solo para ella. “¿Por qué tiene que poner buena cara si no ha tenido buena semana?” proclama en La chica perfecta. “Si está mal que se joda”, le espeta a su ex en Conexión psíquica. Normal que puedas decirlo. Miles de personas locas por ti. Miles de personas bailando contigo. Maria grita, salta, baila. Soy feliz.

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Sobre la firma

Jordi Amat
Filólogo y escritor. Ha estudiado la reconstrucción de la cultura democrática catalana y española. Sus últimos libros son la novela 'El hijo del chófer' y la biografía 'Vencer el miedo. Vida de Gabriel Ferrater' (Tusquets). Escribe en la sección de 'Opinión' y coordina 'Babelia', el suplemento cultural de EL PAÍS.
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