El juicio contra la intendente del Palau de les Arts suspendido por enfermedad de la imputada

El juicio por malversación de fondos públicos en el Palau de les Arts de Valencia, que este martes debía comenzar en la Ciudad de la Justicia se ha suspendido por dos razones como ya adelantó este diario: la incomparecencia de la investigada Helga Schmidt por motivos de salud y la petición de tiempo para preparar la defensa del nuevo abogado de la antigua intendente del coliseo, el exfiscal Carlos Sáiz, tras la renuncia del anterior abogado por motivos, también, de salud. "Un episodio cerebral" sufrido el día de Reyes y por el que tuvo que ser trasladada a un centro hospitalario de urgencia, ha sido la causa, según Sáiz, de que su clienta no acudiera a su cita con el tribunal valenciano y se quedara en su residencia italiana de Milán. 

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El nuevo representante de Schmidt, que ha explicado el estado de salud de su defendida aportando documentación, –partes médicos escritos en italiano que había recibido mediante WhatsApp–  ha solicitado un aplazamiento que le permita ponerse al día de la causa y que proporcione tiempo para que su clienta se recupere y pueda asistir a juicio. El tribunal ha aceptado la petición de Sáiz, pero le ha reclamado que aporte certificados médicos que garanticen y justifiquen la ausencia de Schmidt en el juicio y la petición de reposo de tres semanas. 

La dirigente del Palau desde el año 2015 en que se inauguró, y su director financiero, Ernesto Moreno, se enfrentan a siete años de cárcel, por prevaricación, malversación y falsedad. Los empresarios Joaquín Maldonado, José Antonio Noguera y Pablo Broseta, a dos años y ocho meses.

La investigación se inició tras un informe de la Intervención de la Generalitat de 2013 que indicaba que Schmidt adjudicaba contrataciones a una empresa de la que era consejera, Patrocini de les Arts. y lo hacía, según el magistrado, usando el nombre que consta en su pasaporte austriaco, Helga Pittioni, “para ocultar su participación en una sociedad privada que contrataba directamente con la Fundación Pública de la que era intendente".  

Según el informe, la gerente del Palau no cumplió con los requisitos en las contrataciones artísticas de figuras como Zubin Mehta (5,3 millones entre 2006 y 2013) y el cantante Plácido Domingo (984.300). Además, adjudicó por más de 800.000 euros a la sociedad Radcliff, la mercantil propiedad de Broseta, la confección de programas y folletos de la ópera. La empresa, según el juez, se limitaba a realizar tareas de intermediación, "carecía de capacidad de impresión". Sin embargo, el margen de beneficios que obtuvo fue "desorbitado", mientras el trabajo real lo siguió realizando la misma empresa que lo hacía, Imprenta de Comunicación Gráfica. 

El tribunal ha señalado nueva vista oral para el próximo 4 de noviembre. El juicio se prolongará hasta el 12 de diciembre.