Un gol de penalti del líder, suficiente

El Eibar mantiene el liderato de la Liga Adelante al ganar al Sabadell en Ipurúa en un partido igualado y emocionante hasta el final. Le ha bastado un gol de penalti para solventar un partido que le consolida en lo más alto.

Los guipuzcoanos, que suman ya 45 puntos, sufrieron en el césped ante el equipo catalán, que llevaba cuatro jornadas sin ganar pero que vendió cara su derrota en un feudo donde nunca ha vencido, aunque en él logró el ascenso a Segunda A en la última ocasión en la que lo visitó. Aunque el marcador sólo se movió una vez, pudo hacerlo más, ya que los dos porteros fueron con diferencia los mejores en ambos bandos.

El Eibar saltó al campo decidido a lograr la victoria y Jota Peleteiro pudo marcar en el primer minuto para el Eibar, pero su toque de balón en el área en vaselina lo despejó Nauzet. Minutos después el futbolista gallego fue demasiado generoso y, en lugar de disparar a puerta, centró a Mainz, pero de nuevo conjuró el peligro el portero Nauzet.

Los dos laterales del Eibar protagonizaron sus dos siguientes ocasiones, ya que Yuri (m. 21) se internó en el área, regateó a un defensor y tiró con fuerza, pero Nauzet se encontró el balón y lo paró con su cuerpo. En un saque de esquina, Bóveda cabeceó el balón y de nuevo atrapó Nauzet, el mejor del conjunto catalán en la primera parte.

El inicio de la segunda mitad fue como el de la primera, con un Eibar que salió al ataque. En el minuto 56, un disparo de Morales fue cortado con una mano por Longás y el árbitro señaló penalti, transformando Arruabarrena la pena máxima en gol.

El portero local, Xabi Iruretagoiena, evitó el empate del Sabadell con una estirada magnífica tras un buen disparo de Longás. Minutos después, Xabi hizo otro paradón a tiro de Gato, cuando otra vez se cantaba el gol.

En el tiempo añadido pudo cambiar el desenlace del partido, porque el defensa local Raúl Navas despejó un buen tiro de Gato; y en la última acción del duelo, el portero Nauzet evitó un segundo gol eibarrés al despejar un disparo de Arruabarrena en un 'uno contra uno' tras un rápido contragolpe.