El calor dispara el riesgo de incendios forestales

Las altas temperaturas registradas ayer, que alcanzaron máximas de 36 grados en Valencia y Xàtiva, obligaron a decretar el máximo nivel de preemergencia ante el riesgo de incendios forestales en la Comunidad Valenciana.

El riesgo extremo de incendios forestales supone la prohibición de realizar cualquier tipo de fuego, incluso en las zonas recreativas autorizadas, por lo que se suspendieron todas las autorizaciones otorgadas. Durante toda la jornada, el personal que forma parte del plan especial de riesgo de incendios forestales fue puesto en situación de alerta máxima.

En ciudades como Gandia se llegó a los 33 grados, mientras que en Alicante, Elche y Requena se registraron 32 grados centígrados. En el norte las temperaturas fueron ligeramente más suaves, como en Castellón o Vinaròs donde no se sobrepasaron los 30 grados.

En estas condiciones, un incendio de matorrales obligó ayer a cortar la carretera CV-36 entre los municipios valencianos de Paiporta, Picanya y Benetússer, según informó el Consorcio Provincial de Bomberos y el Centro de Gestión de Tráfico.

El corte de tráfico se prolongó durante más de tres horas y obligó a desviar a los automovilistas por la V-30 y por la carretera de Albal.

Para sofocar el incendio se desplazaron efectivos de bomberos del Consorcio Provincial, así como medios aéreos para evitar la propagación de las llamas, facilitada por las altas temperaturas registradas.