Anecoop sufre la histeria desatada en Europa por la crisis del pepino

Joan Mir, director general de Anecoop, el primer exportador español de frutas y hortalizas, confesó ayer que está viviendo "la peor crisis alimentaria" que recuerda en su vida, pero no dudó en expresar su indignación hacia el proceder de la autoridad regional alemana que apuntó directamente hacia los pepinos españoles como origen del brote que ha segado ya 14 vidas.

"No se ha tenido en cuenta la presunción de inocencia ni del producto ni del lugar de origen. Y se hace culpable a toda la familia. Toda la producción española está bajo sospecha", lamentó Mir, antes de conocer los primeros análisis que arrojan dudas sobre la presencia de la bacteria en pepinos españoles.

Sobre la reacción de las autoridades alemanas, Mir comentó: "Es algo que no había pasado nunca. Vendemos en toda Europa, en Suiza, en Italia, en Francia y el problema solo se da en Hamburgo. Está claro que la bacteria se impregnó en el pepino por un problema de manejo, pero la alarma desatada va a causar grandes males a corto y a medio plazo".

"En toda Europa, la sandía sin pepitas se identifica con la marca Bouquet"

El ejecutivo de Anecoop afirmó: "El Gobierno español debe tomar medidas serias contra el Gobierno alemán, pedir indemnizaciones pero, sobre todo, un esfuerzo potente para restaurar la confianza de los consumidores".

La alarma desató muchas dudas sobre los controles de los alimentos, pero Mir asegura que no es el caso: "La trazabilidad ha funcionado perfectamente. Se sabe de qué campo procedían los pepinos, qué camión los transportó y dónde se volcó un palé que fue recompuesto. Y eso fue en destino". Se sabe que los pepinos no fueron vendidos por Anecoop, entre otras muchas cosas.

La parte negativa de la alarma es otra. Mir muestra el aluvión de mensajes que ha recibido en su Blackberry que le comunican sucesivas anulaciones de pedidos. Una cadena de supermercados austriaca, por ejemplo, anula la compra de melocotones alegando "la histeria" que se ha extendido entre los clientes hacia los productos españoles. Las pérdidas solo se podrán cuantificar al final de la temporada, en el mes de septiembre.

"Desde el primer momento hemos intentado restaurar la confianza de nuestros clientes, pero cuando la ola se convierte en un tsunami ya no podemos hacer nada. Ahora es cuestión de Gobiernos. Está claro que el Gobierno alemán ha sobreactuado", sentenció.

Mir defendió la calidad de los productos agrícolas españoles en una convocatoria para presentar la última campaña de promoción de la sandía sin pepitas que Anecoop, la primera empresa española de comercialización hortofrutícola desde hace 35 años, vende desde 1991.

La cooperativa de segundo grado centrará sus esfuerzos de promoción en Francia, Alemania, España y la República Checa. Como novedad, la sandía se promocionará a través de redes sociales como Facebook o Twitter para que los usuarios puedan compartir sus hábitos de consumo de frutas.

Juan Safont, presidente de Anecoop, destacó cómo "en toda Europa se identifica la sandía sin pepitas con la marca Bouquet".