Madrid no hará recortes que afecten a la calidad de los servicios

La Comunidad de Madrid ha recibido una carta firmada por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la que se les pide que en un plazo de 15 días no apruebe créditos que no garanticen el cumplimiento del objetivo de la estabilidad presupuestaria. La región madrileña se encuentra entre las que se han desviado del objetivo. La Consejería de Economía y Hacienda, Engracia Hidalgo, asegura que el Gobierno regional sigue comprometido con la reducción de la deuda, pero ha marcado una línea roja a Montoro: se reservarán esos fondos siempre que no afecten a la calidad de los servicios públicos como la sanidad, la educación y los servicios sociales. El Gobierno regional tiene que estudiar todavía en profundidad el contenido de la misiva recibida y calcular la cuantía y de qué partidas presupuestarias se va a detraer.

“Es verdad que Madrid no ha cumplido el objetivo de déficit en 2015, pero hay que tener en cuenta que somos los que más hemos cumplido durante la crisis”, ha recordado Hidalgo esta mañana en la Asamblea. El déficit del año pasado superó el 0,7% del PIB marcado como límite por el Estado y se situó en el 1,3%. “Es la mitad de la media del resto de las comunidades que incumplen y además 10 puntos por debajo de la media en relación al PIB”, ha explicado.

Montoro expone en la misiva que a las comunidades no van a tener que realizar ningún recorte para alcanzar el objetivo del 0,3% del PIB, porque, entre otras cuestiones, se va a mejorar la financiación autonómica y considera que no se van a repetir gastos extraordinarios.

La consejera culpa del desvío presupuestario a la ola de calor veraniega y al menor porcentaje de éxito de la vacuna de la gripe, que obligó a aumentar la contratación de médicos y al pago de la medicación para la hepatitis B. Esta última partida supuso 250 millones que el Ministerio ha contabilizado como déficit a pesar de haber prometido lo contrario. “Servicios que junto a la educación y a la atención a la dependencia no podemos dejar de ofrecer”, dice. Al mismo tiempo, aclara que nueve de cada 10 euros del presupuesto se dedican en Madrid a gasto en servicios sociales.

Desde el año 2011 hasta ahora el presupuesto regional se ha reducido en unos 1.000 millones de euros. Datos que, añade Hidalgo, muestran el esfuerzo “tan importante” que se ha llevado a cabo y que “se seguirá haciendo”, siempre teniendo en cuenta que su prestación no es negociable.