La producción nacional de biodiésel se desploma

“La industria española de biodiésel ha entrado en una fase definitivamente terminal, que acabará con su práctica desaparición salvo que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo (MINETUR) publique rápidamente en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Orden de asignación de biodiésel, que quedó completamente tramitada durante la pasada legislatura, según APPA, la asociación que agrupa a los productores españoles.

“La magnitud de la tragedia es evidente a la luz de los últimos datos conocidos: las importaciones de biodiésel, procedentes casi totalmente de Argentina e Indonesia, alcanzaron en el último trimestre de 2011 una cuota del 89% del mercado español”, señalan.

Pese al aumento de la demanda de biodiésel, la producción de la industria nacional bajó en 2011 por primera vez en la historia, derrumbándose casi un 50% y situando el ratio medio de utilización de su capacidad en sólo el 14%. “Desgraciadamente, el sector del biodiésel está en las últimas”, asegura Alfonso Ausín, presidente de APPA, para quien “solo una actuación rápida y decidida del nuevo Gobierno puede ya salvar este tejido productivo y sus puestos de trabajo”.

España cuenta con 50 plantas productoras que apenas pueden competir

La crisis que arrastra la industria española del biodiésel desde hace varios años está causada por la competencia desleal de Argentina e Indonesia, países que aplican un sistema de tasas diferenciales a la exportación (TDE) mediante las que gravan en menor medida el biodiésel que las materias primas utilizadas para su fabricación, dicen en la asociación.

Ello otorga a ambos países una ventaja competitiva artificial, estimada en más de 100 euros por tonelada de biodiésel, que ha llevado a la parálisis a la gran mayoría de las cincuenta plantas existentes en España, entre las que se extienden los concursos de acreedores y las regulaciones de empleo, sin que ni siquiera las fábricas más grandes estén en condiciones de aguantar esta situación por mucho más tiempo.