El PP veta los últimos intentos de reforma en las dos cámaras

El PP ha decidido bloquear cualquier posibilidad de reforma de las reglas de juego en el Congreso y el Senado. Los grupos se reunieron ayer en la Cámara baja y constataron que el PP se niega a intentar un último acuerdo para cambiar el reglamento antes de que acabe la legislatura. El acuerdo que alcanzaron el PSOE y el PP lleva bloqueado casi dos años porque los nacionalistas reclaman el uso de lenguas cooficiales. Ayer hubo un último intento, pero el PP rechazó aprobar "con prisas" un nuevo reglamento -el vigente es de 1982 y nunca se ha logrado reformar- que tendría que aplicar "una nueva mayoría" tras las elecciones. Todos los demás grupos culparon al PP del bloqueo.

Mientras, el proyecto de reforma del Senado para potenciarlo como Cámara de representación territorial terminó de fracasar la semana pasada con una nueva y definitiva negativa por parte del PP a iniciar siquiera el debate. Pío García-Escudero, portavoz de este partido en el Senado, clavó el último clavo en el ataúd de la reforma en esta legislatura, al negar de manera informal al presidente de la Cámara, Javier Rojo, el apoyo de su grupo a este proyecto, según confirmaron fuentes cercanas a ambos.

Rojo había adquirido desde el principio de la legislatura el compromiso de iniciar una reforma constitucional del Senado, una necesidad que reconoce toda la clase política pero nadie ha terminado de poner en marcha. Rodríguez Zapatero se comprometió en el Pleno del Senado a iniciar una ronda de contactos con los grupos sobre este tema en septiembre de 2006. No lo hizo. El Senado aprobó al principio de la legislatura la creación de una ponencia, pero esta no se ha llegado a reunir jamás por la negativa del PP.